Pasarás el Sena sobre el puente que a Notre Dam dá. Pasearás a su vera, abrígate que hace frío, visita las pajareras..
En el Luvre hazte una foto, si puedes y si te dejan, delante de la Victoria (de Samotracia!) y guárdatela para siempre, como guardo yo aquesta
París tiene un regalo en cada plaza, por ejemplo, impresiona, la Iglesia de San Agustín:con su gran gran rosetón enmarcado por un majestuoso frontón y por fin, un domo con cúpula que culmina a sesenta metros de altura. Las tres puertas de la fachada fueron realizadas por Christofle; el conjunto mezcla elementos románicos y renacentistas. La riqueza ornamental de la fachada, formada por cuarenta y cinco figuras de piedra, doce de bronce, tres personajes pintados sobre lava, fue destacada por los críticos contemporáneos
Y si subes a Montmartre, que subirás, voto a tal, llévate la afotera, que yo no pude llevar, y me trae mejor imagen que la que voy a robar:
En sus escalinatas párate a escuchar a un cantante que cante una canción triste de libertad y de amor, que te emocionará. Pero no se te ocurra hablar, porque te llamarán "español"!!SIEMPRE NOS QUEDARÁ PARÍS PARA PODER SEGUIR
A la tercera va la vencida: primero fue Londres, luego Venecia y por fin le toca el turno a París. Oh la la!!!
ResponderEliminarGracias por este regalazo que me has hecho, me ha llegado al coraz♥n!!!la afotera me la llevaré sin duda, y espero traer un regalo de cine a mi vuelta. A ver...
Un abrazo Amado!!!
BUEN VIAJE, CINEXIM!!
ResponderEliminarAh, por cierto, la advertencia de que no hables cuando escuches cantar, o te llamarán "español" merece una aclaración: Me pasó a mí hace 30 años, y me jodió contriubir a la fama de gritones que tenemos, que lo de "español", líneas afuera, a mucha honra, aunque aquí dentro, visto lo que se ve, dan ganas de bajarse, pero esa es otra.
Aterrizamos en París y tras buscar el hotel, fuimos a comer algo. Como el día no acompañaba, decicimos pasar la tarde el el Louvre, buscando La Gioconda, La Venus De Milo y la de Samotracia. Nos fotografiamos junto a las tres. Buscamos en vano La Virgen De Las Rocas-pues estaba cedida. Cenita y al hotel.
ResponderEliminarSegundo día: metro hasta Innocents y Torre Eiffel. Un auténtica maravilla. Me fotografié como los Duran Duran en aquel videoclip de la bso de aquella peli de James Bond-jajja.De la torre fuimos a rendir homenaje a Diana De Gales, visitando el lugar del terrible accidente y de allí, el Arco de Triunfo y los Campos Elíseos, donde comimos. De allá plaza Concorde y la Madaleine-fue en esa iglesia donde se celebró el funeral de Marlene Dietrich. Merendamos y continuamos nuestra marcha por las galerias Lafayette, Opera y la plaza Vendôme y el Ritz-que es donde se hospedaba Gary Cooper en la deliciosa película Ariane.
(Continúa)
Como ya era tarde para ver el jardín de Las Tullerías, decidimos dar una vuelta por el sena hasta Notre Dame. Nos paramos sin embargo junto al Orsay-donde Orson Welles había rodado El Proceso-pero no entamos. Lo dejamos para una nueva visita. Cenamos prontito y nos fuimos al hotel.
ResponderEliminarA la mañana siguiente fuimos a Montematre. Recorrimos sus calles, nos fotografiamos frente a la iglesia, visitamos su cementerio en busca de la tumba de Truffaut y almorzamos en el bar de la peli Amelie. De ahí pasamos a visitar el Moulin Rouge. Lástima de no verlo de noche iluminado!!! De ahí cogimos el metro para acabar en las Tullerias y pasear hasta Saint Michele-donde finalmente comimos.
Tras comer vistamos Notre Dame pero esta vez por dentro-la tarde anterior había concierto y era del todo imposible visitarla, de la misma manera que no pudimos subir a las torres pues a las 16:30 ya no te permitían hacer cola. Una lástima!!!
Visitamos Saint Michel-donde hicimos compras y merendamos ante la imposibilidad de visitar los jardines De Luxemburgo-y acabamos ante el Panteon y el barrio latino-donde descubrimos el lugar de la peli de Woody Allen donde los protagonistas se trasportaban al Paris de los años 20. Fue todo un descubrimiento no buscado, de verdad.
Visita a La Bastilla, cena y hotel. Salíamos al día siguiente muy pronto. Realmente no hay nada como París y necesito una segunda visita, por todo lo que no nos dio tiempo a visitar. Comimos muy bien y la gente fue muy amable con nosotros-a pesar de ser españoles, jajaj.
Amado, siempre nos quedará París, un lugar realmente mágico!!!