"...Animado por el éxito de la gasolina con plomo, Midgley pasó luego a abordar otro problema tecnológico de la época. Los refrigeradores solían ser terriblemente peligrosos en los años veinte porque utilizaban gases insidiosos y tóxicos que se filtraban a veces al exterior. Una filtración de un refrigerador en un hospital de Cleveland (Ohio ) provocó la muerte de más de cien personas en 1929.4 Midgley se propuso crear un gas que fuese estable, no inflamable, no corrosivo y que se pudiese respirar sin problema. Con un instinto para lo deplorable casi asombroso, inventó los clorofluorocarbonos, o los CFC.
Raras veces se ha adoptado un producto industrial más rápida y lamentablemente. Los CFC empezaron a fabricarse a principios de la década de los treinta, y se les encontraron mil aplicaciones en todo, desde los acondicionadores de aire de los automóviles a los pulverizadores de desodorantes, antes de que comprobase medio siglo después que estaban destruyendo el ozono de la estratosfera. No era una buena cosa, como comprenderás.
El ozono es una forma de oxígeno en la que cada molécula tiene tres átomos de oxígeno en vez de los dos normales. Es una rareza química, porque a nivel de la superficie terrestre es un contaminante, mientras que arriba, en la estratosfera, resulta beneficioso porque absorbe radiación ultravioleta peligrosa. Pero el ozono beneficioso no es demasiado abundante. Si se distribuyese de forma equitativa por la estratosfera, formaría una capa de sólo unos dos milímetros de espesor. Por eso resulta tan fácil destruirlo.
Los clorofluorocarbonos tampoco son muy abundantes (constituyen aproximadamente una parte por cada mil millones del total de la atmósfera), pero poseen una capacidad destructiva desmesurada. Un solo kilo de CFC puede capturar y aniquilar 70.000 kilos de ozono atmosférico.5 Los CFC perduran además mucho tiempo (aproximadamente un siglo como media) y no cesan de hacer estragos. Son, por otra parte, grandes esponjas del calor. Una sola molécula de CFC es aproximada
mente diez mil veces más eficaz intensificando el efecto invernadero que una molécula de dióxido de carbono... 6 y el dióxido de carbono no es manco que digamos, claro, en lo del efecto invernadero. En fin, los clorofluorocarbonos pueden acabar siendo el peor invento del siglo xx."
lunes, 8 de febrero de 2010
CLORO-FLUORO-CARBONOS...CFC...SOS
¿Tampoco los CFC influyen en el clima? (PINCHA EN LOS ESQUEMAS Y VERÁS) Yo no sé nada, pero con mis sospechas llenaría una enciclopedia. ¿Pruebas? Dejémoslo en indicios. Hé aqúí uno. Copio otros párrafos del mismo libro citado en la anterior entrada:
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
En relación con el cambio climático seguramente no todo es como lo pintan y, muy posiblemente a alguien le dejó de ser rentable producirlos, hay ciertos adelantos que no interesa que se lleven adelante. ¿Alguna vez veremos un coche electrico?, no resulta rentable para nadie.
ResponderEliminarHay máquinas (toros y retractiles en logística) que son capaces de tirarse 24 horas subiendo y bajando mercancia y dicen que los coches no tienen mas de 80 ó 90 km de autonomía y que las baterias serían pesadisimas...
Da que pensar
Caramba, esto que comentas de las máquinas con baterías duraderas sí que deberíamos de saberlo todos. Con tu permiso, lo pondré en una entrada. Mil gracias
ResponderEliminarVayamos por partes, ¡que veo que se nos está acumulando el trabajo!
ResponderEliminar1) Amado, yo creo que Flores no se refiere a la existencia de una máquina con baterías duraderas… eso recordaría al “perpetuum mobile”. Para mí que está denunciando el hecho de que haya máquinas eléctricas que puedan trabajar durante 24 horas, mientras que, en comparación, los coches eléctricos disponen de autonomías ridículas. ¿Es eso Flores? Si no es así me lo decís.
2) Con la manía que tenemos desde tiempo inmemorial en relación con el fin del mundo ahora le toca el turno a la capa de ozono. Perdón por la autocita, pero en mi comentario PAVORES ECOLOGICOS disponible en http://paredesz.blogspot.com/2006/11/pavores-ecolgicos-continuacin-del.html me hacía eco del criterio taxonómico de los pavores ecológicos empleado por Gustavo Bueno según el cual, esto de la capa de ozono, se podría englobar bien dentro de las catástrofes de índole natural (si la evolución de la capa de ozono tuviese que ver con los ciclos solares), o bien dentro de las catástrofes antrópicas (si fuese el hombre el responsable de su destrucción debido a los CFC, como sostiene Amado).
Con esto quiero decir que el miedo es libre y si pensamos que somos nosotros los responsables de la destrucción de la capa de ozono esto nos permitiría pensar que el problemón se puede revertir (variando nuestros hábitos, eliminando los CFC, etcétera) y ello nos daría seguridad. Creo que la cosa va por ahí.
Bueno amigos, ¿y qué pasaría si al final la destrucción de la capa de ozono no fuese tan perjudicial como algunos afirman? Vaya lío, ¿no?
En 2006 cité en HOMO VIATOR un artículo publicado en la revista Nature (1994). En este artículo el científico británico Ralph Toumi explicó que, según sus investigaciones, el deterioro de la capa de ozono está directamente relacionado con la formación de nubes que impiden la penetración de luz solar en la atmósfera de la Tierra.
Los rayos solares ultravioletas, afirma este estudio, inducen a una reacción por la que generan radicales hidróxilos (OH). Estos radicales, a su vez, provocan la creación de unas nubes brillantes que devuelven una cantidad mayor de luz solar al espacio.
El proceso se potencia por el estrechamiento de la capa de ozono en la estratosfera, puesto que este «agujero» permite que más radiaciones ultravioletas penetren en las capas bajas de la atmósfera.
Por lo tanto, el deterioro de la capa de ozono genera la formación de una barrera de nubes que impide la penetración de mucha luz solar y provoca el enfriamiento de nuestro planeta.
Insisto, ¡vaya lío!
No, no. No pensaba en la impensable máquina de movimiento perpetuo. Se trata de baterías que aguantas duros "trabajo" durante 24 horas. Que no es poco. Tiene razón Flores: no interesa, de momento, cambiar de fuente energética.
ResponderEliminarRespecto a los efectos del CFC, bueno, no creo que sean inocuos. Como beneficiosos tampoco son, la conclusión es clara. ¿Cómo medir el daño que causan? Para eso están los científicos. Creo a los que dicen que suficiente daño para demasiadas personas durante algún tiempo indefinido, que será demasiado para los afectados.
Oka, aclarado.
ResponderEliminar